Debates y reflexiones sobre la baja de la edad de punibilidad
Antes de adentrarnos en el tema que nos convoca no queremos dejar pasar la oportunidad de recordar en estas líneas al compañero Jorge Trinckler quien durante años llevó a cabo la incansable tarea de mantenernos informados y en permanente estado de reflexionar sobre cuestiones internacionales, nacionales y locales. Asimismo agradecer a lxs compañerxs que nos permiten participar en esta columna sobre un tema que debe estar siempre presente en quienes, como Jorge y este medio, venimos luchando por una sociedad más justa en la cual, al decir de Agustín Tosco “ el hombre no sea lobo del hombre, sino su compañero y hermano”.
El día 4 de septiembre participamos de la jornada de reflexión sobre la baja de edad de punibilidad organizada por el Municipio de Morón y llevada a cabo en la sede del Colegio de Abogados del distrito, la cual contó con una gran convocatoria y la participación de docentes, estudiantes, organizaciones sociales, y público en general. Durante la misma se desarrollaron dos mesas temáticas con expositores de diferentes ámbitos y procedencias.
Luego de la bienvenida del presidente del Colegio, Dr. Jorge Frega, la Directora de Políticas para Juventudes, Muriel Tassara Franco, puso de manifiesto la satisfacción que representaba para ella el poder participar y moderar la primera mesa del encuentro de la que formaban parte Ana Casamento (Asociación Civil Familiares de detenidos en cárceles federales); Claudia Cesaroni (Abogada, magister en criminología) y la Diputada Nacional, Mónica Macha.
A lo largo de sus exposiciones las panelistas pusieron de manifiesto desde diferentes perspectivas el rechazo a este proyecto de exclusión que pretende imponer el gobierno anarcocapitalista de Javier Milei y se sostiene con un modelo represivo a cargo de Patricia Bullrich, tanto en el afuera, en cuanta manifestación o acto de reclamo popular, como en el interior de las cárceles e instituciones para menores en conflicto con la ley penal que no son otra cosa que centros de tortura y dolor.
Claudia Cesaroni recorrió el camino de su exposición haciendo referencia a estadísticas que marcan el mínimo porcentaje de jóvenes que cometen delitos graves, lo que haría innecesario cambiar la ley resaltando además el lugar de importancia que tiene la República Argentina en el marco del derecho internacional al ser, junto con Cuba, el país que tiene a los 16 años, como edad mínima de punibilidad.
Desde su lugar de familiar, Andrea Casamento, se refirió a la necesidad de pensar una sociedad inclusiva, donde haya pleno acceso a derechos básicos para todos y todas. A su tiempo, la diputada Macha retomó el tema y manifestó la necesidad de incluir en la agenda parlamentaria, sobretodo en la comunidad. Ambas recordaron la experiencia en el Barrio Carlos Gardel del distrito de Morón y Macha se refirió a la experiencia C+D (+ Comunidad + Derechos).
La diputada vinculó esta problemática, con otra que afecta a los jóvenes que es la de las apuestas online, resaltando de que manera la misma coyuntura histórica social, los “seduce” con la promesa del éxito fácil y por otro lado los castiga con la cárcel.
Para cerrar su mensaje, dejó una interesante reflexión que nos convoca a la acción, para defender lo que en otro momento parecería insólito, que es EL DERECHO A SER ADOLESCENTE.
Luego del receso tuvo lugar una segunda ronda de exposiciones a cargo de Viviana Arcidiacomo (Subsecretaria de Responsabilidad Penal del Organismo Provincial de Niñez y Adolescencia –OPNyA-) y Gabriel Lerner (Abogado, ex secretario de la Secretaria de Niñez y Adolescencia – SENNAF-).
A su turno la responsable de la OPNyA también hizo referencia a estadísticas que señalan el bajo número de niñes –menores de 16 años- involucrados en delitos graves. Se refirió también a la necesidad de un Estado y una comunidad presentes, utilizando el ejemplo, de unos jóvenes detenidos por robar paltas recordando cómo durante su niñez era una práctica casi habitual el hecho de sacar naranjas o quinotos del árbol de la casa de al lado, “conflicto” que se resolvía charlando entre vecinos y vecinas.
Para finalizar la jornada, Lerner celebró la iniciativa de este encuentro, señalando a la presencia como una “secta” que sabía por qué y para qué se juntaba, pero que tiene que tener como objetivo militante divulgar estos datos al resto de la población y dar a conocer: estadísticas, características del encierro, necesidad de abordaje territorial y comunitario de la problemática de la seguridad y la situación de los niños, niñas y adolescentes, que ante la ausencia de un Estado, ve en el surgimiento de propuesta de sectores provenientes del narcotráfico una alternativa de subsistencia.
Para ejemplificar todo esto y refiriéndose a su ateísmo, destacó la palabra y la acción de los curas villeros quienes sostienen la necesidad de discutir una ley de responsabilidad penal juvenil pero desde una perspectiva que tenga pleno conocimiento de las circunstancias por la que los y las jóvenes atraviesan y sobretodo surja a partir de la ESPERANZA PARA Y EN ELLXS.
Para concluir podemos encontrar un denominar común en todas las ponencias, que podría sintetizarse en:
– Necesidad de incorporar el tema en la sociedad toda, para que no sea solamente el discurso represivo y del sentido común de los medios hegemónicos el que penetre en la conciencia de la población.
– Necesidad de un Estado presente que garantice y proteja los derechos de los y las NNyA y no un Estado que se retire de esas obligaciones dejando a lxs jóvenes en situación de abandono, pero que vuelve a hacerse presente para castigar y reprimir.
– Necesidad de encontrar soluciones a esta problemática que surjan del territorio, la participación y la solidaridad de la comunidad organizada.
Pablo Alonso
Ex Coordinador Nacional de Educación en Contextos de Encierro
Docente jubilado
Agrupación 13 de Noviembre – Ituzaingó